Virgilio Nicolás Velásquez, nació en Porlamar el 27 de noviembre de 1937. Hijo de Margarita y Luis, así decía él cuando se le preguntaba. Creció en aquel Porlamar de tardes quietas, de compañeros de partida en la represa (caída de agua)de las monjas,allá al final de la calle Guevara, donde jugaba a columpiarse de los bejucos de los árboles con los compañeros de la infancia a la salida del colegio.
Gran lector, analizador de la problemática de la época, estudió para ser locutor, para ésto se hizo conocer como Virgilio ENE Velasquez, y, en Radio Nueva Esparta trabajó por muchos años,produciendo programas de gran éxito en toda la isla. Luego de algunos años comenzó a ejercer también el oficio de tipógrafo, el cual había aprendido de muy joven en la Tipografía Avance,trabajó en la Imprenta del estado Nueva Esparta, y en su querida Gráficas Virginia, alternando la jornada de trabajo con la música,su gran pasión, la cual había estudiado bajo la atenta mirada del maestro Lino Gutiérrez; así que en la banda del estado Nueva Esparta departió con otros hombres de reconocida trayectoria musical, y en el grupo musical Los Grand Rojos, amenizando las veladas musicales de gran recordación en la Margarita de los años 70,80.
Poeta, su vena compositiva de las odas y poesías, guarda un gran valor para todos los que le conocimos y compartimos con él, pero, sobre todo, se definía como Espiritista, así se describía Virgilio cuando se presentaba ante los amigos, estudioso de las obras de Joaquín Trincado, poseía una gran biblioteca de obras literarias de muchos temas, su pasión por la lectura no tenía límites, su curiosidad por aprender de todo lo convirtió en un hombre con una exquisita cultura general. La única cosa que pudo apartarle de su amor por los libros fue la perdida de su visión, sin embargo no fue un impedimento para seguir cultivando el espíritu.
Hoy haremos un homenaje a su obra poética poco conocida, entre las que destacamos: Manto Azul, Noche Negra, el hijo del desterrado, Momento a María Flor, Duda y muchas obras más que están recopiladas en un trabajo hecho por su hijo Virgilio Ene en el primer aniversario de su desencarnación.
De este poemario publicaremos Momento a María Flor:
...a la monada más linda que se pueda imaginar,
dedico este momento de mi alma. Con todo cariño
con todo mi amor va este "
"MOMENTO A MARIA FLOR"
TENGO UN MAR Y UNA PLAYA
GOLPEÁNDOME EL CORAZÓN.
UN PUEBLO
EN LA DISTANCIA
DONDE HE DEJADO UNA FLOR.
UN CARIÑO
QUE EN SUS OJOS
ME DIO CIEN AÑOS DE AMOR.
UN VELERO PEQUEÑITO,
UN VELERITO DE ILUSIÓN
QUE AUNQUE ESTÁ EN LA DISTANCIA
LO TENGO ANCLADO EN EL ALMA,
Y EN LAS NOCHES
POR MIS NOCHES
VA NAVEGANDO EN MIS SUEÑOS
MUY RISUEÑO
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| VIRGILIO N VELASQUEZ |
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| trabajando en Radio Nueva Esparta |
MUY RISUEÑO MI VELERITO DE AMOR.
DE AQUI DE LEJOS TE MIRO
MI MOROCHITA ADORADA
EN EL PORTA RETRATOS DEL ALMA
Y TU VOZ DE MEDIA LENGUA
Y LLANTO DE MALCRIADA
ME VAN PREGUNTANDO HIJITA
POR EL DIA DE MI REGRESO
POR EL DIA EN QUE VUELVA A APRETUJARTE
EN MIS BRAZOS
MUCHACHITA ENCANTADORA,
ANHELO DE MIS ANHELOS
LUCERITO DE MIS NOCHES,
MARINERITA DE MIS SUEÑOS.
GRACIAS FLOR PATIÑO DE V. POR EL HOMENAJE A MI PRIMO VIRGILIO. MI NOMBRE FRANCISCO PATA DE CACHO MARCANO.
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