¿CÒMO SE HACIA EL CARBÒN VEGETAL EN MARGARITA?. Parte I Recopilaciòn de FLOR PATIÑO DE VELASQUEZ.

Tradición oral...!, ¡què fundamental para quienes como Yo gustamos de urgar en el pasado de nuestra isla venezolana!. 
Principalmente acuño con amor, los relatos que me hacen mis familiares mayores, cuya vida se desarrolló durante esas primeras décadas del siglo XX.
Mi papá adoptivo, José Valdiviezo (86) , mi mamá Evangelia Alfonzo de Patiño(87), mi tía y madre adoptiva María Margarita(79), poseen una memoria prodijiosa para relatar, con mucho detalle, acerca de hechos desconocidos para los más jóvenes y que me inspiran para contárselos aquí en esta página
Una de esas  historias es ésta sobre el carbón vegetal.
Sin duda que has hecho una parrilla y, por supuesto, has tenido que comprar carbón para cocinar el pollo o la carne! Pero ¿te has preguntado alguna vez cuál es el proceso para ese elemento que compras envasado?. Creo que no!!.porque yo tampoco lo sabía!! y no es que pones un haz de leña y le pegas candela, no señor!, es algo mucho más elaborado que les narraré, según ese especialista llamado José Valdiviezo, pues su juventud giró en trabajar ese rubro para poder subsistir en esta hermosa isla del Caribe venezolano.
Su relato me hace viajar a la década de los años 30, cuando los medios modernos para cocer los alimentos eran casi impensables.
....." Tenía casi 11 años cuando comencé a trabajar fuerte en el conuco o el monte de San Antonio, un cacerìo ubicada a varios Km de Porlamar, la ciudad con mayor nùmero de habitantes en Margarita, así que mi trabajo consistía en utilizar los recursos ambientales que me rodeaban, con mi machete y mi cabulla (mecate) me marchaba a buscar la leña para hacer carbón para las familias.
Desde las 4:30 de la mañana comenzaba a apilar los haz de leña, amarrandolo con la cabulla, y poder traerlos desde el cerro hasta la pequeña casa de bahareque, desde donde mi mamá y hermanas ayudaban en los quehaceres como cuidar los animales y sembrar pequeños cultivos.
A eso de las 11 de la mañana, preparaba al final del patio, el lugar necesario para hacer el carbón. 
Esta técnica consistía en hacer una zanja de medio metro de hondo por tres metros de largo aproximadamente, en la cual se colocaban dos baras o listones de madera seca del largo de la zanja y, sobre éstos, se procedía a colocar los pedazos de leña en forma horizontal a lo largo de la zanja, luego de colocar  toda la  leña, se procedía a tapar dicha zanja con pedazos de zinc o cualquier elemento que no se desintegrara con las altas temperaturas alcanzadas en el proceso, y hojas secas de árboles como el tamuto, el roble, dejándole una abertura por cada extremo, una para introducir el fuego y otra para que pudiera "respirar" el producto que se hacìa (carbón). 
Para comenzar a ponerle fuego, tomaba un cardón seco, lo colocaba  por una de las aberturas pegándole fuego, asegurándome que éste transmitiera el calor a la leña apilada dentro, procediendo luego a tapar la abertura, dejando soló la otra para expulsar el calor, ésto se dejaba toda la noche, y desde la casa se podía observar el paso del fuego desde el inicio hasta el final, ya que al fuego consumir la leña la tapa se iba hundiendo ,y así, se podía controlar el rumbo del proceso. 
Se vigilaba para evitar que cualquier hueco en la tapa dejara entrar el aire (oxpigeno) y así se dañara dicho producto y en vez de carbón se obtuvieran cenizas, por lo cual debía taparse cualquier ranura en la tapa del horno.
Una vez consumida toda la leña,la dejaba reposar hasta enfriar, para luego poder envasar el producto en un saco de pita y poder llevarlo hasta la ciudad...!"......

VOCES GUAIQUERIS. Recopilaciòn por FPDV

Estando en el patio de mi casa, sentí un ruido de hojas secas y ramas de árboles.
Al mirar noté a una lagartija nativa de mi isla Margarita que se desplazaba a tomar el sol. Sólo que aquí todos la conocen como "machurrango".
Este incidente me puso a reflexionar sobre el origen del nombre del reptil en esta tierra margariteña.
Aún cuando los especialistas indigenistas y conocedores han dado a la luz pública, que la etnia Guaiquerì ha desaparecido, perdiendo su lenguaje original, es común, en las casas de los hijos de margariteños descendientes de los Guiaquerìs, denominar a ciertos animales, plantas, lugares, poblados y un sin fin de objetos con palabras de la lengua Guiaquerì.
No pretendo ser especialista en la materia.
Hoy aquí trataremos de recopilar vocablos de esta raíz que se utilizan corrientemente entre las familias margariteñas. Comencemos pues esta pequeña lista con palabras como:
MACHURRANGO: es un reptil conocido como lagartija en otras partes de Venezuela.
CHULINGA: ave, paraulata, pájaro de color gris y negro de trinar fino.
CONOTO: ave, cuervo para otras regiones.
CANCACHAPA: reptil parecido a la lagartija.
GUARIPETE: reptil de tamaño mayor a una lagarija.
CHOCHO: ave, turpial
GUATAPANARE: àrbol tambièn conocido como dividive
ACHIPANO: Cerro o colina. Sector de la ciudad de Porlamar.
PALGUARIME: nombre de poblado. Sector popular ubicado al norte de la ciudad de Porlamar.
GUARAGUAO: ave, nombre asignado al zamuro 
GUAMACHE: árbol espinoso.
GUACUCO: molusco del fondo marino.
GUANAGUANARE: ave marina
BOTUTO: caracol de concha grande.
GUARITOTO: árbol con espinas muy irritante de la piel.
YAURERO: xeròfilo, cardón grande.
CHAURE: Búho. Ave nocturna.
PAJUELA: estrella fugaz
 Bueno, he aquí unas cuantos vocablos empleados en el presente por las nuevas generaciones de margariteños
.
 Si necesitan màs información sobre el tema pueden visitar la página de la FUNDACION JOSE JOAQUIN SALAZAR FRANCO (cheguaco) quien fue gran conocedor de nuestra idiosincracia.

http://www.cheguaco.org




LOS ENCAPOTADOS DE PORLAMAR. Relato por Flor Patiño de Velàsquez.

        De la tradición oral he extraído este pequeño relato basado en hechos reales. 


LOS ENCAPOTADOS DE PORLAMAR
      Cuentan los mayores de mi familia que, por la década de los 40 del siglo pasado, apareció, como una moda, el que algunos hombres conocidos de la comunidad, se disfrazaran para que no pudieran reconocerlo los vecinos y familiares cuando venìan de visitar a sus amantes. Por llevar su figura toda cubierta con un paño largo o sábana, o capote se les llamò "encapotados".
       Contaba mi madre, que estos hombres enamoraban a mujeres casadas y esperaban altas horas de la noche para ir a visitarlas, los días que el marido salia a trabajar o se quedaba en alguna fiesta.
       Entonces el "encapotado" saltaba la empalizada que dividìa las casas y corrìa hasta los brazos de la amada infiel. 
       Muchas personas lo veìan "salir" pero guardaban el secreto de su identidad, solo decían: "anoche, a eso de las 2 de la mañana corrió un "encapotado" por el fondo de fulano de tal"... Este comentario se expandía en la pila de agua donde, día a día, iban las mujeres a buscar el agua, entre ellas, la amada del "encapotado", la cual, repetía el chisme como si no tuviera nada que ver con ella.
       Cuando alguna dama de la comunidad se iba a vivir con el novio decían que en la noche el "encapotado" se había llevado a fulana..
        Como todo lo pasado y motivado a la gran inseguridad que durante los posteriores años ha ido en ascenso desaparecieron los "encapotados" de Porlamar, no fuera que un loco armado por allì le diera un tiro por estar disfrazado sin ser carnaval.

CONOCE A MARGARITA LA ISLA EN EL CARIBE

Hola, hoy quiero hacerles una invitación especial a visitar nuestra isla de Margarita, en el caribe venezolano Disfruta de su música, costum...